La conjuntivitis es una inflamación de la conjuntiva, generalmente causada por virus, bacterias, una alergia, sustancias que causen irritación o productos que se usan para las lentes de contacto, gotas para los ojos, etc.
En general, no afecta a la visión, pero se contagia fácilmente. Si una persona sana entra en contacto con manos o toallas infectadas, probablemente podrá ser contagiado.
La infección desaparece por sí sola sin tratamientos, pero la conjuntivitis bacteriana necesita tratamiento con gotas o ungüentos antibióticos.
En ciertos casos, la conjuntivitis puede durar meses o años. Este tipo de conjuntivitis puede ser causada por procesos en los que el párpado se tuerce hacia fuera o hacia dentro, problemas con los conductos lagrimales, sensibilidad a ciertos productos químicos, exposición a sustancias irritantes e infección causada por una bacteria en especial.
Los signos y síntomas más comunes de la conjuntivitis varían según la causa, pero por lo general incluyen lo siguiente:
-Dolor en el ojo entre moderado y fuerte.
-Ojos con rojeces.
-Aumento de la sensibilidad a la luz.
-Lagrimeo y ardor.
-Si la infección es bacteriana el ojo suele segregar una mucosa que pueden pegar las pestañas.