Protege a tu piel del frío

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Cada vez nos acercamos más al invierno que trae consigo bajas temperaturas que afectan a nuestra piel. Produce alteraciones que hacen que nos aparezcan unas incómodas rojeces en el rostro.  Estas aparecen por un cambio en el flujo sanguíneo, pero la intensidad de los daños que el frío nos produce van en función de la temperatura, el viento, la altitud y el grado de humedad del ambiente.

Los problemas más comunes son el enrojecimiento de las mejillas, las manos secas o labios cortados. Pero lo cierto es que hay numerosos problemas dermatológicos que tienen que ver con las bajas temperaturas. Pero no solo es por el clima sino que también nos afectan las calefacciones que resecan el ambiente o las duchas que nos damos con agua caliente a casi 40 grados. Todos estas pequeñas acciones diarias son las que castigan a la piel.

Las principales consecuencias de todo esto como hemos dicho son las rojeces y cuperosis y la sequedad en general de la piel. Ante esto hay una serie consejos que deberíamos adoptarSi ya de por sí es importante la hidratación ahora un más, es imprescindible que hidratemos nuestra piel casa día y si hablamos de la cara dos veces: antes de dormir y por la mañana.

Es bueno que exfoliemos la piel como mínimo dos veces por semana para así eliminar todas las células muertas. Y aunque no les prestemos tanta atención los labios son una parte muy sensible, tiene una piel más fina que el resto del rostro así que hay que hidratarlos mucho. Si tienes las incómodas rojeces que produce el frío de forma constante, existen cremas indicadas para tratar este problema en concreto.

Además de estos cuidados debemos tomar ciertas precauciones. Abrígate bien porque el frío aplicado directamente en nuestro cuello o piernas puede hacer que la piel de esa zona se reseque también, haciendo que se escame. Es bueno seguir una alimentación equilibrada y beber como mínimo 1,5 litros de agua al día.

Por último, práctica algo de ejercicio y a ser posible evita al máximo el alcohol y el tabaco que siempre producen más toxinas en nuestro cuerpo. No dejes de lado a tu piel este invierno y cuídala, seguro que lo agradecerás.

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