¡Necesitas energía para trabajar!

Septiembre es la verdadera cuesta del año. Durante el verano llevamos una vida mucho más tranquila, sin horarios. Nuestro cuerpo se adapta a un estado de relajación que luego es difícil de cambiar.

¿Cómo se puede recuperar la energía después de las vacaciones? Un camino muy importante, más de lo que la mayoría tiende a pensar, es la alimentación. A continuación tienes unos consejos que te vendrán muy bien para afrontar con fuerza la jornada laboral:

Realiza un desayuno completo: No hay que salir de casa sin desayunar. Son necesarias las proteínas de los lácteos o embutidos bajos en grasas como pavo o jamón york, y los hidratos de carbono presentes en los cereales, el pan o las galletas. Además, las frutas o los zumos naturales aportan vitaminas y minerales para empezar a trabajar con fuerza.

Toma un tentempié a media mañana: Cuando hayan pasado dos o tres horas desde el desayuno se debe realizar un tentempié a base de fruta, lácteos, café o infusiones.

Bebe abundante agua durante el día: A medida que el cuerpo pierde agua, la capacidad intelectual va disminuyendo de forma progresiva y son muchas las funciones cognitivas que se ven debilitadas: la memoria, la atención, la destreza, etc.

No abuses de las bebidas estimulantes: Una taza de café ayuda a mantener la concentración. Sin embargo, bebido en exceso puede provocar nerviosismo, insomnio y empeorar el estrés. Además, las bebidas con cafeína aumentan la producción de orina, favoreciendo la deshidratación.

Por último, puedes darte el placer de una ración diaria de chocolate puro: Éste aumenta la energía y mejora el estado de ánimo gracias a la cafeína y otro estimulante denominado teobromina.

¡Mucho ánimo, hay que estar al 100%!